Halloween y las vacaciones de invierno son un momento del año divertido y festivo en el que los caramelos y otras golosinas aparecen por todas partes: en casa, en el colegio, en fiestas y otras reuniones de la temporada. Dado que los caramelos son tan tentadores a la vista, es especialmente importante que los padres y cuidadores se aseguren de que todos los medicamentos, vitaminas o suplementos que puedan confundirse por caramelos se guarden de forma segura, en un lugar alto fuera de la vista y del alcance de los niños pequeños.
Para los niños pequeños, algunos medicamentos se parecen a las golosinas que disfrutan durante las fiestas. Las vitaminas de gominola y las pastillas de colores a menudo parecen caramelos, y los medicamentos líquidos pueden parecer refrescos o jugos. Es fundamental almacenar y utilizar estos productos de forma segura, especialmente durante esta temporada de alto riesgo.
Aproximadamente 35,000 niños pequeños acuden a la sala de emergencias cada año por haber ingerido medicamentos que quedaron a su alcance. Para ayudar a prevenir este tipo de incidentes, la campaña Up and Away ofrece consejos prácticos a padres y cuidadores a fin de mantener a los niños más seguros en Halloween y durante todo el año.
Guarda los medicamentos en un lugar alto y alejado
Elige un lugar alto y seguro de tu casa que los niños no puedan alcanzar ni ver. Guarda todos tus medicamentos, vitaminas y suplementos, especialmente los que vienen en forma de gominolas, en ese lugar, incluso entre cada dosis. Si llevas medicamentos en un bolso o cartera, en tus bolsillos o en un pastillero, asegúrate de mantenerlos fuera de la vista y del alcance de los niños pequeños.
Recuérdale a las personas que cuidan a tus hijos, huéspedes y visitantes que tomen las mismas precauciones cuando estén en sus casas.
No dejes medicamentos al alcance entre cada dosis
Si tu o tu hijo están enfermos y necesitan tomar una dosis cada pocas horas, puede resultar tentador dejar el medicamento a mano en el mesón de la cocina o en la mesita de noche del niño enfermo. Sin embargo, es importante que lo guardes para evitar una sobredosis involuntaria.
Guarda los medicamentos en recipientes a prueba de niños
Vuelve a cerrar siempre la tapa de seguridad de los frascos de medicamentos cada vez que los cierres. Si una botella tiene una tapa de cierre que gira, gírala hasta que oigas un "clic" o hasta que ya no puedas girarla más. Si necesitas poner los medicamentos en otros recipientes, como pastilleros, asegúrate de que cuenten con dispositivos de seguridad para niños. Muchos no los tienen y los niños pequeños pueden abrirlos fácilmente.
Enséñale a tus hijos sobre la seguridad respecto de los medicamentos
Es importante que le enseñes a tus hijos qué son los medicamentos y por qué tu o un cuidador en quien confíes son las únicas personas que pueden administrárselos. Nunca le digas a los niños que los medicamentos son como caramelos, incluso aunque no les guste tomarlos.
Prepárate para una emergencia
Llama inmediatamente al Centro de toxicología al 800-222-1222 si crees que tu hijo puede haber ingerido un medicamento, vitamina o suplemento, incluso si no estás completamente seguro/a. Guarda el número como contacto en tu teléfono para tenerlo a mano en caso de emergencia.
Si deseas obtener más herramientas e información para ayudar a proteger a los niños, visita UpandAway.org.